Uno de los atractivos religiosos más importantes de Florencia está en la plaza Santa María Novella.
No nos referimos sólo a la plaza en sí, que resulta impresionante por sí sola, sino a la Basílica de Santa María Novella que podemos encontrar en este lugar.
Su construcción data el año 1049 y lo hermoso de su fachada atrae a cientos de visitantes cada día y lo impactante de su interior les roba el aliento al quedarse vislumbrados por lo que ven.
No hay manera de evitar conmoverse al ver tan sublime demostración de talento plasmada en cada rincón de la iglesia.
No importa si eres religioso o no, esta iglesia es algo que no debes perderte en tu visita a Florencia, Italia.
Santa María Novella en Florencia es una de las más visitas por lo complejo de su arquitectura y lo nutrido de sus obras de arte.
Desde fuera de la iglesia se puede apreciar lo especial de su fachada y dentro de ella se comprueba que el arte sacro es digno de admirarse por cualquiera, sin ser precisamente devoto de una u otra religión.
Historia Santa María Novella en Florencia
La iglesia de Santa María Novella, así como las construcciones que hay a su alrededor datan del año 1049.
Su construcción se realizó sobre los restos de un oratorio de décadas anteriores, donde se realizaban cultos a Santa María Novella.
Tuvieron que pasar casi dos siglos para que se convirtiera en la sede oficial de los dominicos en Florencia.
La Basilica de Santa María Novella es una construcción muy cuidada, tanto por fuera como por dentro, ya que, al tratarse de un monumento de tantos siglos de existencia, la restauración es constante.
Sin embargo, han hecho un trabajo tan bueno que da la sensación como si fuera una construcción reciente. Es impresionante pensar que, en realidad, es una construcción de casi 1.000 años.
Para el año 1279 ya había sido iniciada una ampliación de la Basílica, cuya dirección y supervisión estuvo a cargo de Sisto Fiorentino y Ristoro de Campi.
Las obras de ampliación culminaron a la mitad del siglo XIII, y fue justo el Papa Eugenio IV quien consagró la iglesia en 1420.
Como podrás notar, en esos años las construcciones y modificaciones tomaban décadas, incluso más, por lo que se trataba de trabajos donde estaban implicadas varias generaciones.
¿Qué ver en Santa María Novella?
Sin duda en la Iglesia de Santa María Novella hay mucho que ver, sobre todo si vas de viaje varios días a Florencia.
Debes empezar por apreciar la hermosa fachada, con la cual podrías pasar largos minutos y no terminar de ver cada detalle en ella.
En el interior de la basílica encontrarás muestras impactantes de su belleza y de su inmenso cuidado, ya que se puede notar cómo han conservado cada parte que compone la iglesia.
En sus paredes podrás admirar frescos sumamente preservados que datan de la Edad Media. En ellos se aprecia pasajes de la vida diaria de esa época, y resulta impresionante e interesante en igual medida. Es una imagen clara de la Florencia de hace varios siglos.
Además, hay piezas de arte, como pinturas y esculturas, de artistas sumamente importantes.
Las obras más sobresalientes son La Trinidad de Masaccio, un fresco que muestra una técnica que se inventó en la época, y el Crucifijo de Brunelleschi, la cual es una escultura en madera.
Fachada
La fachada de Santa María Novella en Florencia es casi tan impresionante como el interior de la basílica, ya que está hecha de mármol y es una obra de arte sin igual.
Se le considera una fiel representante del arte del Renacimiento de Florencia.
En 1350 fue cuando se le recubrió con mármol, tanto de color blanco como verde, haciendo que luciera de la forma que se le puede ver ahora. Esto se hizo igualmente con otras edificaciones de Florencia en esa época.
El trabajo en la fachada terminó de realizarse en 1470, incluyendo los nichos ubicados en los costados.
Todo el aspecto de la basílica es de estilo gótico, logrando una atmósfera mística que envuelve a quienes visitan la Basílica de Santa María Novella.
Interior
La zona interior de la Basílica de Santa María Novella está dividido en tres naves, cada una con múltiples arcos decorados con mármol blanco, tanto verde como blanco, que resulta sumamente elegante y muy estético.
En la vidriera de rosetón, ubicada en la fachada, se encuentra representada la “Coronación de la Virgen”, de 1365.
Es una imagen cautivadora que a más de uno de la ha provocado llorar de emoción. Y no es una exageración.
Las naves ubicadas a los costados y en la parte trasera de las capillas, hay más vidrieras con múltiples colores, dentro de las cuales están las mejores consideradas:“Virgen con el Niño” y “San Juan y San Felipe”, creado por Filippino Lippi proveniente del siglo XIV.
En la nave derecha podrás observar la esplendorosa capilla de los Rucellai, que cuenta con frescos del siglo XIV.
Justo en la capilla es donde se encuentra la estatua de mármol creada por Nino Pisano, llamada “Virgen con el Niño”.
En la parte trasera del altar central, está colocada la capilla Tornabuoni, donde se encuentran los frescos de Domenico Ghirlandaio, a quien le tomó 5 años pintarlos.
Además, y, por si fuera poco, también hay presencia de obras de Miguel Ángel.
En dichos frescos hay plasmadas imágenes de la vida de la Virgen y de San Juan. Todos en escenas localizadas en Florencia en la época renacentista.
En el altar se encuentra quizá la figura más impresionante de toda la Basílica de Santa María Novella, el crucifijo creado por Giambologna.
Es un impactante crucifijo de grandes proporciones, con un colorido que contrasta con lo dramático de la figura que expone.
A un costado se encuentra la capilla de Filippo Strozzi, con frescos de Filippino Lippi pertenecientes al ciclo “Vidas de los apóstoles San Felipe y San Juan”.
Más adelante, encontrarás la Capilla Gondi, donde se ubica otro crucifijo, hecho de madera y creado por Brunelleschi.
Casi al final, está la sacristía con el “Crucifijo con la Virgen y San Juan Evangelista”, creado por Giotto.
Para finalizar, en la nave ubicada a la izquierda, se encuentra la Trinidad de Masaccio, la cual es considerada su obra maestra. En ella usó una nueva técnica para esa época.
Claustro
El claustro, o Chiostro Verde, fue construido en 1332 y se encargó de su decoración Paolo Ucello.
Sirvió de sendero para llegar a la Capilla Española y en ella se pueden admirar un variado conjunto de frescos que llevan por nombre “Triunfo de la Orden Dominica”.
Igualmente cuenta con obras que datan de los años 1430 y 1446, que resultan ser las más emblemáticas y en las que se puede ver una representación del Diluvio Universal.
El claustro sirve como vía de acceso al refectorio, el cual es una sala cubierta por arcos en formas ovaladas que se construyeron entre 1340 y 1353.
Cualquier arquitecto de la actualidad desearía poder saber cómo hacían tales maravillas en esa época con tan pocos recursos.
Entradas, horario y precio
Visitar la basílica de Santa María Novella en Florencia es realmente recomendable y no significa un coste muy alto.
Incluso puede salir mucho más barato de lo que piensas.
Esto se debe porque sólo quienes sean mayores de 18 años pagan el precio de entrada completo, que es de 7,50€.
Las personas que tengan entre 11 y 18 años de edad, o que tengan más de 65 años, pagarán sólo 5€.
Los menores de 11 años no pagan absolutamente nada.
Si dispones de la tarjeta Firenze Card tendrás un descuento de 5 euros en la entrada.
Algo muy importante es que sepas los horarios de la Iglesia, ya que varían dependiendo de la época del año en que la visites.
- De abril a septiembre, el horario de apertura es de lunes a jueves a las 9:00h de la mañana y cierran a las 19:00h de la tarde. Los viernes abren a las 11:00h de la mañana, y cierran a las 19:00h de la tarde.
- A partir de octubre, y hasta marzo, el horario de apertura es a las 9:00h de la mañana, y cierran a las 17:30h de la tarde. De lunes a jueves. El viernes abren a las 11:00h de la mañana y cierran a las 17:30h de la tarde.
¿Cómo llegar a la iglesia?
La Iglesia de Santa María Novella está ubicada en la plaza del mismo nombre, y puedes llegar a ellas de varias maneras.
Pero debido a su céntrica ubicación lo más recomendable es ir andando o tomar un autobús.
Existen varias líneas que te llevarán hasta la Basílica de Santa María Novella, y puedes tomar cualquiera de ellas. Las líneas que pasan por ahí son la 1, 2, 4, 6, 11, 13, 14, 17, 22, 23, 28, 36, 37 y C2.
Los conductores suelen anunciar los lugares de interés cada que se acercan a ellos, por lo que sabrás en qué lugar bajarte.